Cuadros que puedes girar, cartelas en blanco para proponer nuevos títulos y una colección de imágenes obtenidas mediante un juego de tintas que tiene mucho de coreografía visual: esos son los ingredientes principales de la exposición ‘(No) son solo manchas’ de la artista Gatalina Tintachina. La muestra, que se podrá ver en La Guajira hasta el 5 de abril, reúne una serie de obras abstractas elaboradas con tinta sobre papel y presentadas en elaborados marcos dorados que contrastan con la sencillez contemporánea de las imágenes, en una propuesta que busca romper todos los protocolos.
Tras el nombre artístico de Gatalina Tintachina se encuentra Laura Rodríguez, artista almeriense que ha pasado toda su vida rodeada del arte en casi todas sus disciplinas. Licenciada en Bellas Artes, bailarina y actriz, aterriza de nuevo en Almería después de dedicarse a las artes durante 10 años en Madrid. Aquí, tierra de belleza y de calma, vuelve a conectar con el pincel y retoma lo que lleva haciendo desde niña. Se bautiza como Gatalina, en honor de su gata, Lina, la cual le acompaña mientras pinta y le inspira el amor por la belleza cada día.
“(No) son solo manchas” es la primera exposición en gran formato de esta artista donde muestra el proceso-resultado del retorno al hogar y a la pintura. Un retorno a la experimentación y el placer de presenciar ese espectáculo, jugar con las formas que el agua y la tinta ofrecen. Mezcla de azar e intención, donde la luz y la oscuridad compiten o se acompañan.
Esta exposición pretende, además, deshacerse de la carga y protocolos artísticos, sin necesidad de buscar lenguajes más profundos o conceptuales, pues, como su nombre indica, son solo manchas, o no… son lo que cada persona vea en ellas. La muestra incluye propuestas interactivas que invitan al espectador a jugar: cuadros que puedes girar para darle otro sentido y cartelas en blanco para que puedas escribir tu propio título.
Esta “burla” al protocolo se puede leer en los elementos que presentan la obra, enmarcada en grandes cuadros de volutas doradas, intentando absurda y descaradamente añadirle valor, y creando así la ironía en el concepto de arte abstracto como algo elevado o elitista.
Una exposición llena de elementos que pretenden echar por tierra todo lo ostentoso, lo que está de más, una invitación a que el público pueda jugar y disfrutar con ellas tanto como lo ha hecho la artista al crearlas, porque el arte debe ser un lenguaje en el que podamos conversar sin miedo al código y las etiquetas.
La exposición «(No) son solo manchas» podrá visitarse en La Guajira hasta el día 5 de abril de 2025.